01.10.2013
Simeone debe quitarse la careta. Se ha ganado ese derecho y debe aparcar la modestia. Esa ambición no tiene motivo alguno para ser mala. Al revés, todo un estímulo para afición y jugadores. Ya es hora de que dé un paso y que reconozca que su Atlético, ese mismo que ahora trata de igual a igual al Barcelona, tal y como demostró en la Supercopa, el que pelea por no caerse del primer puesto de la Liga, vuelve a ser un grande, un equipo que lucha por todos los títulos que disputa.
El argumento del ‘partido a partido’ ya no vale. Este Atlético ha crecido y vuelve a ocupar el puesto que nunca debió dejar atrás, el de un candidato a todo y que por culpa de la mediocridad en la que ha vivido muchos años, perdió de la misma manera que malgastaba millones en fichajes y operaciones que pocos acertaban a comprender.
Lo curioso es que ese resurgir ha llegado cuando las instituciones oficiales han
cerrado el grifo al Atlético y a sus dirigentes. No hay lugar a
experimentos, ni a fichajes millonarios. Ahora toca pagar por lo hecho
en las décadas pasadas. Es el momento de apelar a la cordura, a las
cosas hechas con sentido, por mucho que duela a los aficionados, esos
que reclaman otros fichajes cuando ven que se marcha Falcao a cambio de 50 millones de euros
(10 fueron a parar al club rojiblanco) y en su lugar aparecen
Villa, Aranzubía, Baptistao y los no deseados Guilavogui y Alderweield o
cuando saben que Adrián o Juanfran tuvieron el cartel de transferibles
hasta el último día de mercado. Es el Atlético real, el de ahora, el que
sabe vivir en la ‘austeridad’ y la combina a la perfección con el éxito gracias a la gestión de Simeone.
El argentino atravesó momentos de duda, de mirar hacia otro lado, de arrepentirse de no haber aceptado alguna de las ofertas llegadas desde Italia (Inter y Nápoles), pero esos momentos le han hecho más fuerte, se ha aferrado al grupo. Desconfía de algunas cosas que le llegan desde arriba, pero su fe ha crecido hacia el equipo, ese mismo al que ha dado forma y que parece haber convertido en imbatible. ¿Lo dudan? Diez de diez. Siete en Liga, dos de la Supercopa y una de la Champions.
En el Santiago Bernabéu siguen sin ver al Atlético como rival. Curioso tras lo visto el sábado. No incomodan los cinco puntos de ventaja rojiblancos y sí los azulgrana. Tal cual.
http://blogs.elconfidencial.com/deportes/el-palco/2013-10-01/simeone-se-tiene-que-quitar-la-careta-de-una-vez-y-aparcar-la-modestia_34885/