A mí me está haciendo mucha gracia de la resaca pos partido como los medios se quejan constantemente de la bipolaridad pero como se niegan a creer que el Aleti les planta cara y como reniegan de este hecho. Es realmente gracioso, porque ver a un cerdo regodeándose en su propia mierda mientras busca una verdura que no existe en el lodo siempre lo es. Por un lado está la vikingada, que sólo puede renegar por principios. Se han metido tanto en su papel de periodistas ultras que ya no pueden salir. Luego los catalufos, que sólo quieren tener un rival en el que fijar sus iras. Tener un aliado gracioso les va bien, pero un verdadero rival les saca de quicio.
Y luego están el resto de periodistas de pandereta de otros equipos, palmeros de los periodistas de cámara vikingos y culés, los del Málaga, del Bilbao, del Violencia, del Cerdilla... que no soportan ver que ese estatus que les regalaron los golfos de comparsas sin ningún tipo de aspiración real, pero que les hacía sentirse importantes en su eterna e histórica mediocridad, con absurdos complejos provincianos (y ojo, que yo no tengo ningún afan contrario a las zonas, provincias y regiones españolas que no son Madrid o Barcelona, al contrario, son ellos, los periodistas y aficiones localistas o nacionalistas las que caen en ese catetismo provinciano y trasnochado) se ha terminado y que el Aleti si es lo que ellos nunca serán y lo que siempre ha sido, un grande de verdad (aún con la lacra que tenemos encima, y con la desigualdad presupuestaria reinante).
Y lo segundo es como los medios vikingos (la mayoría), se empeñan en hacer énfasis en las jugadas violentas, las protestas y demás, de ambos equipos (ahí no discriminan, y me gusta, porque nos meten en el mismo saco que su gran obsesión) y no en el partido en el que ellos no estaban y que demostró que se enfrentaban dos equipazos, los dos que impidieron que estén ellos. Es grandioso y sólo tiene una palabra: CHOLO. Pero es que además el Cholo no les deja margen ni lugar a la crítica con su impecable e intachable comportamiento. Estoy seguro que están deseosos de ir a por él con lo que sea, pero no pueden, no les deja ni ocasión para la crítica con su comportamiento, y tienen que rumiar, y rumiar, y rumiar. Espero que exploten en su propia mierda.