Me emocionó de verdad, solo me faltó el ver cómo bajó al infierno a rescatar a su Atleti de la segunda división, un gesto grande de amor y compromiso.
Por otro lado me quedo también con las palabras de su preparador físico, diciendo que en su último contrato con un club, dejó una cláusula que estipulaba que podría romper dicho contrato si llegaba una oferta de la selección o del Atleti... grande Zapatones.
Que grande sería ver ganar este año al Atleti la Champions que casi gana el, y que Gabi recogiera la copa con la camiseta de Luis, solo de pensarlo se le pone la piel de gallina.