No puedo citar a Vafe (no sé por qué coño no me deja hacerlo el ordenador), pero sus palabras son las que justo pensaba escribir. Cuando los griegos inventaron aquello del agón, seguro que pensaban en vivir algo parecido a lo que ayer se vivió en San Mamés. Allí, por cojones, cayó el Barça y le empataron al Madrid. Pues por cojones hemos ganado una segunda vez en ese infiernillo rojo.
En ese campo, ayer, justo ayer, sobreponerse a un gol tempranero y a un sorprendente desastre defensivo, como el que protagonizamos, encabezados por Godín, tiene un mérito incomparable. Lo de Costa es, efectivamente, incalificable. Sí me atrevo, en cambio, a calificar a Koke: extraordinario. Como también lo fueron los 30 primeros minutos de la segunda parte; de los mejores que ha brindado este equipo este año.
Y lo de los árbitros... Vi la última media hora del derbi catalán, sumo lo hecho por Teixeira II, y la operación me da como resultado que conseguir que no gane esta Liga el Barça será algo más que una proeza. Será algo que, en estética, cabría caificar de sublime. En ética, creo que habría que inventar un nuevo término, que debería tener como referente al Cholo.
Señoras y señores, disfruten y presuman con legítimo orgullo de este equipo. Se lo merecen ustedes, pero sobre todo se lo merece el propio equipo y quien lo dirige.