Es una de esas lesiones que solo por el nombre y la cautela en los tiempos de tratamiento, hace sentir miedo. Lo primero es desear a Costa una recuperación completa con o sin quirófano. Luego pensar en cubrir su ausencia que parece que provoca incertidumbre por lo probablemente larga. Y finalmente, palito para muchas criticas, por que esta lesión no parece que sea de las de hace unas horas.
El fútbol es un sentimiento que se lleva muy adentro...y se concreta en el Atlético de Madrid.