Los miembros de la Asociación Señales de Humo nos encuadramos dentro de ese grupo de atléticos avergonzados a los que hizo ayer referencia el presidente del Atlético de Madrid Enrique Cerezo.
Pero han de saber el presidente y el resto de la cúpula directiva que hay un refrán que reza “de aquellos polvos estos lodos”. Ya sentimos vergüenza este verano con la bochornosa y rácana planificación deportiva para esta temporada 2009/2010. Temporada en la cual el equipo debería de haberse asentado en la Champions League. Una planificación que, por desgracia, ha sido calamitosa, como las habituales de una década a esta parte.
Sentimos vergüenza cuando se “explotó” a los aficionados colchoneros en la previa de la Liga de Campeones, haciendo pasar por caja a aquellos aficionados que previamente pagaron su abono y posteriormente su abono total. Sentimos estupor cuando presentan unas cuentas llenas de números rojos y con una creciente deuda que está matando al club sin que hagan algo para remediarlo. Y ahora por último, la vergüenza y el estupor se mezclan cuando vemos que para el partido de vuelta de la Copa del Rey frente al Recreativo de Huelva van a hacer pagar de nuevo a los abonados. Para colmo han decidido fijarlo a una hora intempestiva.
Entendemos que el horario no lo marca el propio club, pero no comprendemos cómo los dirigentes, tan hábiles en campañas publicitarias, no han sido conscientes de que un resultado tan adverso y un horario tan tardío traerán como consecuencia un estadio desangelado, que provocará una estampa lamentable.
Inocentes aquellos que pensábamos que desde el primer día, luego del fiasco del pasado miércoles en Huelva, se iba a iniciar una campaña para tratar de crear un ambiente “épico” para el partido de vuelta, con precios populares que ayudasen a llenar el estadio. Comprobar que no es así, resulta incomprensible.
Desde Señales de Humo rogamos que reconsideren esta nefasta política recaudatoria y que desde el propio club se ponga la primera piedra para que, al menos, se genere el clima propicio para que el Atlético de Madrid, de la mano de su incondicional afición, intente superar la eliminatoria copera frente al Recreativo de Huelva.