Columnas del Foro

EL FRENTE Y EL RESTO DE LA AFICIÓN (10/06/2002)

Empezaría sentando una base. Nunca se entenderá el Atlético de Madrid sin los que cantan y animan todo el partido y sin los que viajan con el equipo vaya donde vaya. Por un momento imaginaros el Vicente Calderón sin ellos. Aquello sería una tumba sin más ánimos que algún aplauso aislado, o los silbidos al árbitro, (silbar sí sabe la mayoría). Por eso no podemos quedarnos indiferentes ante lo que pueda ocurrir con el Frente. Casi preferiría una crítica, que podría dar pie a un debate, que el silencio y la indiferencia.

Y porque no se entendería el Atlético de Madrid sin un grupo lo más numeroso posible que anime y viaje, me parece conveniente que debatamos sobre el Frente. A favor o en contra, pero debatamos porque es imprescindible salvar el apoyo a nuestro equipo, tanto en casa como fuera. Y para empezar yo voy a dar mi opinión con la sana intención de ayudar a la continuidad y no solo eso, sino la mejora del grupo.

Yo creo que el Frente, junto a una mayoría de grandes virtudes, ha tenido algún problema. El más grave su divorcio con gran parte del resto de la afición. No ha sabido “llegar” al aficionado medio y no siempre por culpa de los demás. Algunas actuaciones no han sido ni explicadas ni entendidas por la gente atlética. Sobre todo su giro en relación con Jesús Gil, pasando de los cánticos del tal y tal a lo del Gil cabrón. Y la gente lo achaca a la retirada de privilegios. No se ha sabido explicar que lo uno es consecuencia de lo otro, pero al revés de lo que piensa la gente. Se quitan los privilegios porque hay enfrentamientos y no viceversa. A lo peor es que ha habido un poco de soberbia en el Frente y no se ha creído oportuno tener que dar explicaciones y sí considerar a los demás como unos comepipas, tribuneros y cosas similares. Últimamente incluso dentro del Fondo Sur ha habido enfrentamientos entre los que portaban estandartes y los que protestaban porque no veían el partido. También a esos se les ha dicho que ese no era su sitio, que se fueran con los tribuneros. Ese error ha ido conduciendo a un divorcio cada vez más evidente entre el Frente y el resto de la afición, e incluso disensiones entre ellos mismos.

Nunca ha sido bueno creerse que es mejor ser pocos y buenos que muchos y malos. Se puede llegar a caer en la capillita o peor aún en la secta enfrentada al mundo. Por eso se impone reconducir algunas actitudes. El Frente será grande en la medida en que sea el motor del resto de la afición y no ande enfrentado con ella. En el Atleti cabemos todos, los que dan una parte importante de su tiempo al Atleti, y los que no tienen esa dedicación casi exclusiva. Los que van al estadio siendo abonados, (lo que ya supone un interés evidente por el equipo), y los que no son abonados, (bien porque no puedan o no quieran ir cada quince días al Estadio, bien porque sean los atléticos de la diáspora y se encuentren en lugares de España y del mundo alejados de Madrid), pero simpatizan con el Atleti. Los del Fondo Sur y los de Tribuna. A todos nos une lo mismo aunque sea de formas y con intensidades diferentes.

Además, como decía no sé quien el otro día los silbidos al Frente cuando se canta contra Gil no van a favor de Gil sino en contra del Frente. Es más el día del partido contra el Burgos, una de esas abuelas atléticas de toda la vida que estaba a mi lado en grada de preferencia y que le había hecho hasta gracia mi camiseta anti-Gil, cuando el Frente empezó a cantar se volvió hacia el fondo sur y gritaba ¡fascistas!. Y por más que intenté explicarle que las cosas eran de otra manera no hubo forma. Se revolvía contra el Frente no a favor de Gil. Es decir que esa labor de acercamiento al resto de la afición es importante para deshacer equívocos.

Alguien ha propuesto un comunicado del Frente en la prensa, pagándolo, en el que se pida perdón a la afición por todo lo que hayan podido hacer mal, explicando lo de que el enfrentamiento con Gil es anterior a la pérdida de privilegios y no al revés y dando vuestra opinión, que es la de mucha gente sobre lo nefasto de la gestión de Gil y cómo nos llevó a la administración judicial, a segunda división y tratar de deshacer el efecto demagógico de este personaje. Y dar a conocer en ese comunicado cómo la no renovación de abonos es una represalia por hacer campaña contra Gil y no un castigo por hechos violentos que nadie ha demostrado hacia los veinte implicados. No estaría de más que gente que no sea del Frente le ayudara a hacer ese comunicado porque tal vez sepan mejor lo que a la afición les gustaría oír sin traicionar las convicciones del grupo.

Y finalmente, y para no dar argumentos no cuesta nada deshacerse de cierta parafernalia como eso del terror en las calles con lo que algunos acaban sus comentarios, los gritos políticos cuando vienen los equipos vascos, esos gritos de “puta Eta puto Zabaleta” y cosas así que chirrían los oídos de mucha gente. Y manifestarse claramente contra la violencia, sin condiciones. Y si hay algún sector al que le pueda costar cambiar algunas cosas pues tratar de convencerles o puerta, que es más importante el Frente en su conjunto que mantener algunas cosillas.

 En definitiva, se imponen acciones que posibiliten la continuidad del Frente porque éste es muy importante para el Atleti. Una vez más me limito a iniciar un debate porque tal vez lo dicho en este comentario ni sea lo único y tal vez ni siquiera lo mejor. Y porque mi análisis solo es una opinión personal que debe ser contrastada con otras opiniones. El caso es que al final el Frente salga ganando, que es de lo que se trata.