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Las Perlas del Foro de Señales de Humo

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El Foro de Señales de Humo, a lo largo de su historia en múltiples formatos, siempre ha sido sinónimo, entre otras cosas, de calidad en los escritos de sus participantes. Aquí se ofrece el histórico de aquellos escritos que merecieron el "¡¡A Columnas!!" por parte del resto de foristas.

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noviembre 2000 - Artículos

Amores que matan

"Es un muerto de hambre y un pesetero mercenario que se marcha porque no quiere al Atleti, lo único que le importa es el dinero". ¿Cuántas veces hemos oído estas palabras salir de la boca del individuo que nos preside desde hace casi 15 años? Infinitas.

Gil ha sido, sin duda, el dirigente futbolero que más ha hecho por el sostenimiento del INEM en los últimos años. Entrenadores, miembros del cuerpo técnico, jugadores de más o menos relumbrón, barrenderos del club… todos han pasado por el juicio sumarísimo del sátrapa de Marbella y muchos de ellos han sido ejecutados al amanecer por no amar lo suficiente al Atlético de Madrid. Algo en lo que nadie puede superar al señor Gil, por supuesto. Es casi tan insuperable en esta disciplina como dando pelotazos inmobiliarios.

 


 

Toda esta introducción viene al caso para recordar a un traidor pesetero. Un Judas Iscariote que padecimos en el banquillo del Calderón durante tres largas temporadas. Se trata del innombrable Radomir Antic.

Este agente del maligno llegó a un desmoralizado Atlético de Madrid en junio de 1995. El equipo acababa de salvarse del descenso de puro milagro y había que empezar de cero. La tarea principal, desde luego, era motivar a la plantilla, pero también había que modernizar las estructuras del club, que estaban bastante obsoletas y tenían una estructura demasiado piramidal, con Gil en la cúspide.

El traidor Antic, cogió a este equipo hundido, lo reforzó con fichajes sensatos, como Milinko Pantic, y llevó al Atleti a ganar la Liga y la Copa del Rey en la misma temporada, un "doblete" legendario que nadie había conseguido hasta entonces en la larga historia del club.

Sin embargo, Antic no se durmió en los laureles. Tuve la gran suerte de poder seguir de cerca la era del yugoslavo en el banquillo colchonero y pude comprobar todos sus esfuerzos por transformar al conjunto del Manzanares en un grande del fútbol mundial. Fichó a los mejores técnicos y fisioterapeutas, dio una gran importancia a la preparación física de los jugadores, intentó crear una estructura eficaz para gestionar la cantera, peinó hasta el fondo los mercados en busca de fichajes (como Vieri)… Todo para convertir al Atlético en una institución perfectamente engrasada con un solo objetivo: codearse con los más grandes.

Y lo consiguió. En sus 3 temporadas, el nombre del Atleti y la camiseta rojiblanca helaban la sangre de los aficionados de media Europa. Los monstruos sagrados del fútbol español y continental debían sudar la gota gorda para poder derrotarnos. Igualito que ahora. También tuvo sus errores, por supuesto. Su soberbia le enemistó con gran parte del vestuario e hizo algunos fichajes desafortunados. Aún así, su balance es netamente positivo

Con un traidor anticolchonero como él a los mandos de la parte deportiva del club ganamos una Liga y una Copa, llegábamos bastante lejos en competiciones europeas y conseguíamos acabar en la parte alta de la tabla en mayo. Desde luego, se mereció la puñalada trapera de Gil cuando fichó a Arrigo Sacchi.

Lo que vino después, todos lo conocemos. Sacchi demostró que sus ideas estaban muy bien a finales de los 80 con Van Basten, Gullit y Rijkaard de corto, pero que en los 90, estaban totalmente desfasadas. Al final, Gil tuvo que llamar al bombero Antic para apagar el fuego.

Lo consiguió y el presidente se lo agradeció con justicia: dándole la patada en el trasero en la final de Copa y trayendo a Ranieri, que terminó de hundir el trabajo del serbio, que tuvo que regresar para intentar salvar lo insalvable. Entonces, el alcalde de Marbella le despidió con cajas destempladas, como debe hacerse con los traidores.

Resumiendo, con el traidor Antic que sólo miraba por su dinero y nada por el Atlético los indios conseguíamos tener aterrorizados al Ajax, al Borussia, al Barça, al Real Madrid…

Mientras que con una persona que quiere al club como nadie las pasamos canutas contra equipos con el bagaje futbolístico del Levante, el Tenerife, el Murcia, el Eibar o el Recreativo de Huelva.

Sí, decididamente, hay amores que matan.

Posted: 30 nov 2000, 12:00 por SDHEditor
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A los Reyes Magos

 

Dicen que son buenos, muy buenos. Dicen que luchan, pelean y sienten los colores como el que más. Ganan partidos complicados en la categoría posiblemente más difícil del Fútbol Español. Tienen hambre de fútbol y sed de triunfos. Quieren hacerse un nombre en este mundillo del balón al precio que sea y lo más rápidamente posible. No se sienten obligados a nada y no se les puede presionar porque ni son figuras reconocidas ni perciben salarios desorbitados, ni son portadas de periódicos deportivos o de revistas  del corazón. No están psicológicamente bloqueados por traumáticos descensos ni sonoros traspasos.  
Dicen que no disfrutamos de una economía lo suficientemente saneada como para poder fichar en diciembre a gente que marque la diferencia. El primer equipo no funciona. Cada vez el ascenso está más lejos y los problemas tienen más difícil solución. ¿Por qué no les damos una oportunidad para que crezcan como jugadores, para que se fogueen, para que se diviertan?. Sin exigirles, sin reclamarles nada, sin considerarlos responsables de la situación. A lo mejor la solución de los problemas del equipo está en nuestra propia casa. Y les va a resultar complicado hacerlo aún peor que los mayores.  Son los jugadores del Atlético de Madrid B, que ya purgaron el año pasado los pecados de otros con un descenso inmerecido, y que están pidiendo a gritos tomar el mando de esta nave que se hunde. A ver si nos los regalan los Reyes Magos.  
Posted: 24 nov 2000, 12:00 por SDHEditor
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Paseo de los Melancólicos

No nos merecemos esto. Ése fue el primer pensamiento que me vino a la cabeza cuando crucé el aparcamiento del Vicente Calderón y salí por la puerta del estadio para fundirme en el mar de cuerpos cabizbajos que, como yo, se
dirigían a tomar el metro a Pirámides.

Paseo de los Melancólicos. Pocas veces, el nombre de una calle puede relacionarse más con lo que ahí sucede. Normalmente, el Ayuntamiento tiene una serie de personas ilustres o de conceptos abstractos que, según sus
criterios ideológicos, sociales o, incluso, personales, los hacen merecedores de resucitar en el callejero. Así, casi como si fuera una lotería, a uno le toca vivir en López de Hoyos, en Príncipe de Vergara, en Diego de León, en Ecuador, en Conciliación o en Volver a Empezar sin que se tenga idea de quiénes fueron estos personajes o a cuento de qué se nombró la calle como un sentimiento, un país o una película. Y muchas veces, no tenemos ni tiempo ni ganas de averiguarlo. Bastante hacemos con aprendernos el nombre de memoria para que lo tengan registrado en un montón de ficheros y nos manden las facturas a casa. No nos preocupa que a los generales golpistas les escandalice lo que ocurre en la calle a la que dan nombre, que los escritores nunca se inspirarían en “su” vía para escribir su obra. Y mucho menos que las relaciones entre los vecinos haya de todo menos la “conciliación” que tienen en común, que el ambiente de la calle no tenga nada que ver con el país con el que comparten sustantivo o que Garci nunca se fijaría en un sitio tan normalito para rodar una de sus superproducciones.

 


 

Sin embargo, creo que en el Paseo de los Melancólicos no hubo tal sorteo. Seguramente, el concejal del ramo se fijó, al bautizar la calle, en las cabezas bajas y las caras largas de los que, casi cada domingo, regresaban de ver perder a su equipo.

Y ahora soy una gota de agua en ese mar de melancolía. A mi alrededor, todo es desencanto y decepción. Todas las conversaciones que llegan a mi oído llevan, dentro de sí, una profunda capa de amargura y desesperación. Nadie se explica lo que está pasando y todos echan la culpa a tirios y troyanos.

Lo que parecía una idea genial la semana pasada es ahora un error funesto que delata la poca inteligencia del entrenador. Y en todos los comentarios flota la nostalgia, los recuerdos de un equipo que hizo grandes cosas y que
ahora está hundido en un pozo que no parece tener salida.

El mar de desesperación prosigue su penoso camino hacia el metro y varios coches y un autobús quedan atrapados en él. Los viajeros del 116 parecen tomarse su retraso con el estoicismo de lo inevitable.

Los bares del camino empiezan a llenarse de gente deseosa de consolarse con una caña y ver las declaraciones de los responsables del desaguisado. No dejarán títere sin cabeza mientras la noche y el frío se adueña del Paseo de
los Melancólicos.

Posted: 23 nov 2000, 12:00 por SDHEditor
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CUALQUIER COSA MENOS SILENCIO

Que corren malos tiempos para los atléticos es una verdad incuestionable. La inestabilidad en la cúpula dirigente del Club motivada en gran medida por los asuntos judiciales del señor Gil, y sobre todo la calamitosa situación deportiva del primer equipo (influido claramente, creo yo, por esa inestabilidad directiva antes citada), hace que nos encontremos ante una encrucijada histórica que no parece estemos calibrando su justa medida.

 

 


 

La cruda realidad es que tenemos al equipo en los últimos puestos de la Segunda División, dando una imagen bochornosa y sin ningún viso de recuperar posiciones en la tabla. A la par, según cuentan, la situación económica es también bastante preocupante, con falta de liquidez para afrontar los gastos más cercanos y con el agravante de que continuar en Segunda División haría que los presupuestos tuviesen que variar drásticamente para adaptarse definitivamente a la cruda realidad. Para ponerle la guinda al pastel, Gil sigue inmerso en sus batallas judiciales, aferrado de momento al sillón y tomando decisiones que en el plano deportivo están siendo funestas para la marcha del equipo (su apuesta personal por Zambrano, a modo de ejemplo).

Ante este sombrío panorama, ¿qué estamos haciendo los atléticos? ¿qué opinamos al respecto? ¿estamos preocupados por la situación? ¿creemos que es algo pasajero? Si exceptuamos alguna asociación creada a raíz de la Administración Judicial del Club (ninguna a llegado a tener una implantación tan importante como para dejarse sentir fuerte en la masa social) y el pronunciamiento explícito del Frente Atlético contra la gestión de Gil hace un par de semanas, nada más se ha escuchado de la afición rojiblanca.

En el seno del Frente han surgido discrepancias y parece triunfar ahora la tesis "no agresiva" hacia la cúpula del club. No sé si colaboracionista, pero al menos no agresiva. Dicen que buscando la cooperación para intentar que el equipo suba posiciones... y luego ya veremos. ¿Qué nos queda después? Nos queda la peor reacción posible: EL SILENCIO. Un silencio aterrador que se "escuchó" en el Calderón en la segunda parte del partido contra el Eibar. Cada atlético tendremos una forma de ver las cosas, unos culpables a quien achacar nuestros males, un estilo de decir lo que pensamos. Pero, a mi juicio, resulta absolutamente indispensable que todos demos nuestra opinión, que TODOS TOMEMOS PARTIDO, que gritemos cada uno lo que pensamos y las posibles soluciones que encontramos a esta terrible situación.

Este artículo no pretende ser un discurso anti-gilista llamando "a las masas contra el dictador", ni nada que se le parezca, aunque creo que a estas alturas muchos ya sabéis cómo opino al respecto. Tan solo pretendo llamar a la participación de todos, a la toma de partido, a que todos los atléticos seamos capaces de participar en el destino de un club que llevamos muy dentro y que está pasando por una angustiosa etapa de su historia. Porque, en este caso, el silencio de la afición es la peor respuesta posible y todos tenemos que asumir el papel que nos corresponde.

 
DESTITUCIÓN DE MARCOS

Nunca he sido partidario de sustituciones gratuitas de entrenadores. Pero sí cuando han demostrado su incapacidad para llevar al equipo. En el caso que nos ocupa, Marcos se ha ganado a pulso su destitución.

Yo particularmente me he sentido decepcionado por su labor. Había confiado en él plenamente, como expresé en mi escrito de bienvenida.

 


 Parece ser que este hombre ha perdido frescura y capacidad de reacción ante las dificultades. Pero sobre todo ha demostrado tozudez y nulas visión y estrategia futbolísticas. Me explico: Partidos contra el Eibar y el Murcia. Eibar: Alineación de salida : Ocho defensas!!!: Toni, Aguilera, Njegus, Santi!, Hibic, Hernández, Lloréns! y Gómez; un centrocampista, Leal, y dos delanteros perdidos. Parece que Njegus y Lloréns debían ser falsos extremos, pero que a la hora de la realidad, ni subían las bandas ni cerraban en defensa, con lo cúal, los huecos que dejaban eran muy aprovechados por los extremos contrarios, creando constante peligro para nuestra meta.  Murcia: Alineación de salida: Ocho defensas!!!: Cambió a Lloréns por Toni (¿pero no veníamos diciendo desde hace tres años que era un anciano y que había que traspasarle?) y a Hernández por Gaspar (pero ¿quién coño ha enchufado a este de la melena, que no tiene velocidad, anticipación, ni el coraje que se le supone a un joven de su edad, ni pundonor cuando se desentiende a la menor contrariedad del balón?. Santi es malo como él solo, pero por lo menos se bate el cobre como un javato). Los tres restantes los mismos que contra el Eibar.  RESULTADOS EN AMBOS PARTIDOS: NI UNA SOLA ACCIÓN CREATIVA DEL INEXISTENTE CENTRO DEL CAMPO. Me equivoco: el golazo de Leal (jugada individual contra el Murcia): Los fallos en defensa los mismos y todo lo demás igual de negativo. Todo el mundo sabe (menos Marcos) que el juego de un equipo es generado por los centrocampistas; si prescindes de ellos y recurres a alinear defensas en su lugar, puede que empates si éstos lo hacen bién o mal (como ocurrió con nuestra abigarrada defensa), pero el 95% de las veces, perderás el partido. Pues Marcos, erre que erre: tras el fracaso con el Eibar, saca prácticamente a los mismos contra el Murcia y emplea la misma táctica: ninguna. Como parece que de momento no van a prescindir de él como sería mi deseo: ¿Vamos a ser testigos el sábado de otra repetición de la película? O, por el contrario, ¿Futre y Manolo que saben de fútbol, podrán convencerlo para que saque una defensa “normal” de cinco hombres con el portero, donde los laterales no dejen esos famosos huecos que ya conocen todos los equipos contrarios; cinco centrocampistas más o menos destructores o creadores y a Salva en punta esperando balones (ahora los mediga)?. ASI DE SENCILLO. La alineación pudiera ser: Toni, Aguilera, Amaya, Hibic, el chaval del B (no recuerdo su nombre); Gómez, Leal, Cubillo, Lardín, Carcedo o Lawal y Salva. Esperemos acontecimientos.  AUPA ATLETI!!!!. Modesto de Cantabria.   P.D./ Como siempre, copias de este escrito van a Futre y a Marcos. ¿Se las entregarán?.
¿QUÉ HEMOS HECHO PARA MERECER ESTO?

Este escrito está teñido de las más profundas amargura y desesperanza, más por las circunstancias que rodean al equipo, que por la ausencia de victorias. No comparto la tesis de que al fin y al cabo, ésto es fútbol. Que es un deporte donde unas veces se gana y otras se pierde.  
La gente Atlética se caracteriza por su especial forma de ser, que nos ha hecho coincidir en el Atleti con todas sus consecuencias: personas desprendidas, generosas, sufridas, alejadas del poder y de los triunfalismos; capaces de sufrir por una idea y de permanecer fieles a la misma, cuando lo fácil y gratuito pudiera ser renunciar a la misma. También somos personas orgullosas que de vez en cuando esperamos y necesitamos una correspondencia del “otro”, como pago a una fidelidad. ¿Qué más se nos puede pedir, que no hayamos dado ya  al Atleti?. Si el equipo no nos da victorias dadas sus limitaciones técnicas, si merecemos que los once que salen al campo, se rompan el alma por unos colores existentes desde hace cien años, y que perduraran después de que ellos hayan desaparecido de nuestro entorno por falta de calidad, y sobre todo de amor a una causa. Partiendo de la base de que el Atlético es refugio de jugadores mediocres, como mínimo se podría esperar que jugaran, más o menos bien, como equipo. Para ello están todos los días entrenando, ensayando jugadas... Llegan los domingos y da la impresión de que son jugadores que se han visto por primera vez. Tal es así, que aseguro sin temor a equivocarme, que nuestro equipo de Obras Públicas formado por personas de edades comprendidas entre los 26 y mis 58 años (todos nosotros procedentes del mundo del fútbol), podríamos perder contra los once muchachetes del Eibar, pero nuestro aficionados saldrían del campo relativamente satisfechos, viéndonos congestionados por el esfuerzo y habiendo sido testigos de un juego en equipo, más o menos brillante. Ayer en al Calderón, sucedió todo lo contrario: ausencia de patrón de juego y falta de coraje y amor propio. ¿Qué estilo de juego pretende imponer Marcos?. ¿Contraataque, presión...?. O ¿salir al campo a ver que es lo que pasa?. Alineó a ¡siete defensas! (incluido Toni) que, a pesar de todo, dejaban innumerables huecos en la cobertura y un único protagonista intermitente, Leal, capaz de crear algo de juego. El sabrá que fué lo que les dijo a los jugadores, pero la realidad es que el futbolista que más veces tocó el balón, fue Santi!!!. Después de todos los ya numerados, aparecían Correa solo en una banda, gambeteando a kilómetros del área, y Salva correteando sin sentido de acá para allá. A puerta se disparó dos veces!!!: la del gol y un bombeado de Correa desde fuera del área. Por cierto: ¿quién es un mucahachete que estaba situado por nuestra banda izquierda, con patillas, cintas en la muñeca y varios collares?. Tras la expulsión de un jugador visitante, nuestro técnico no ordena una presión agobiante sobre los diez restantes, dejándolos hacer y así poder desarrollar un juego de equipo de más o menos calidad, que acabó por superar a los “mercenanios rojiblancos”. ESTE AÑO NO ASCENDEMOS, y no lo digo con la boca chica. Es una afirmación basada en nuestra realidad: Vulgaridad de nuestros jugadores, falta de ambición y ausencia de filosofía de equipo. Me podría equivocar si en Diciembre, se ficharan tres o cuatro jugadores de verdadera calidad, y los tres de arriba no nos sacaran más de quince puntos en esas fechas. Más que por mí, me duela la situación por la fiel infantería rojiblanca de todos los rincones de España: por Jose de Lugo, Benjamín, Aviación, Gato, American Indian, Bat, Marcial, por Pepo Orantos de Plasencia, por mi hijo Javier, por mi vecina Luchi de 84 años, por  mis sobrinos de Burgos y Cáceres, por Wandiver, por Quevedo (alcalde de Corvera), por los hombres de Obras Públicas: Moscardó, Tello, Delicado, Alberto y Alberto, Oliva, Luís Antonio, por Monreal, por Carmina e Isabel, por Navarro, etc, etc. A pesar de todo, grito con más fuerza que nunca y con un nudo en la garganta: AUPA ATLETICO DE MADRID!!!. Modesto de Cantabria.   P.D/. El escrito va también a Futre y a Marcos.

 

EL ZAPATAZO Y EL AVESTRUZ

Una nueva derrota ante el Universidad de Las Palmas, y sobre todo la forma tan humillante en que se produjo, desató una nueva caja de los truenos. Van ya unas cuantas y a casi nadie en el club le debió pillar por sorpresa.

 


Gil había apostado personalmente por Zambrano contra la opinión de otros "pesos pesados" del Club y había dado su visto bueno a la plantilla confeccionada para el año en Segunda División. A esta altura de la temporada estaba más que demostrado que la cosa iba muy mal y se acabó fulminando a Zambrano. No se ha cargado a media plantilla porque no puede, pero no por falta de ganas de hacerlo. El fracaso, evidentemente, era responsabilidad suya, aunque los jugadores tienen mucho que ver en todo ello.

¿Qué camino toma para intentar enderezar el rumbo? Pues los cambios tienen bastante trascendencia y pueden parecer acertados o no: Futre acapara (al menos nominalmente) el poder en el área deportiva y se le rodea de hombres importantes en la historia reciente del Club (Manolo, Abel, Tomás) , de donde salen disparados los "Miguel Ángeles". Ruiz pierde directamente su sitio y Gil hijo queda aparcado en el área administrativa. Cuentan que quería irse directamente, pero que su padre no le ha dejado... en fin, cosas poco demostrables.

El gran problema de todos estos cambios, por encima de su acierto o no, es que se hacen con la temporada iniciada, y qué mal iniciada, sin tiempo alguno para planificar como Dios manda y con la única posibilidad de poner parches a lo ya montado. Porque no hay que olvidar que la catarata de decisiones viene motivado por el fracaso inexcusable en la décima jornada de un "nuevo proyecto" de Gil. Un nuevo proyecto tan fracasado como muchos otros y por los que tendría que rendir responsabilidades.

Con posterioridad, una vez desencadenado el cambio, Gil esconde la cabeza como el avestruz. Porque una visión blanda y bienpensada del asunto podría intentar explicarlo como una retirada a un segundo plano para no generar más tensiones y polémicas, con el ánimo de controlar el club desde la sombra y con tranquilidad. Pero yo, al menos, a esta altura de la historia de Gil en el Aleti, no estoy por la labor de juzgarle con benevolencia. Hemos soportado tantos exabruptos, tantos excesos verbales y tanta declaración que no debería haber salido de las paredes de los despachos y los vestuarios, que ahora no se puede observar el curso de los acontecimientos con un mínimo de tranquilidad y benevolencia. La historia de este Club está en juego.

 
CARTA A FUTRE, MANOLO Y ABEL

Estimados Futre, Manolo y Abel: Me considero un auténtico representante de la afición Atlética, y por este motivo me dirijo a vosotros, con intención de aportar algo al equipo, aunque solo sea anímicamente.

¿Será verdad que el Sr. Gil abandona sus actitudes dictatoriales y entra en el camino de la lógica futbolística?. El paso que ha dado al recurrir a vosotros puede ser un síntoma. Lo que pasa es que “a buenas horas”.

 


Evidentemente, los presidentes de los clubs han de rodearse de gente que sepa de fútbol, de personas que puedan manifiestar sin miedo, su desacuerdo con ellos en determinados momentos, en lugar de advenedizos desconocedores del fútbol y que se limiten a decir a todo que sí. Estoy seguro que vuestra incorporación va a suponer aire fresco al grupo de jugadores, la mayoría vulgares, que forman la plantilla. Os oigo decir por activa y por pasiva, que lo que hace falta es trabajo y trabajo. ¿Con esa loable actitud vamos a resolver nuestras problemas en el centro del campo, por carencias de hombres da calidad para esos puestos?. ¿Ello va a suponer que siempre juguemos con once jugadores en lugar de con nueve o diez?. Digo ésto, porque eso sucede cuando salen al campo: Paunovic, Santi, Gaspar, Roberto, Kiko (no da una a derechas y, por supuesto, no mete un gol desde hace dos años, Correa (¡qué pena de gandul y excelente futbolista), etc. ¿Ello va a suponer que, por fín, Salva (auténtico Atlético) reciba balones en condiciones más o menos adecuadas?. ¿Ello va a suponer que al salir al campo los jugadores dejen de mirar al suelo y dispuestos a regresar al vestuario extenuados, de acuerdo a las manifestaciones de Salva?. ¿Ello va a suponer hacer un fútbol móvil, donde todos los jugadores estén en contínuo movimiento, apoyándose unas líneas a otras?. ¿Ello va a suponer que cuando ataquemos lo hagamos con tres o cuatro efectivos, en lugar de hacerlo solo con Carlitos Aguilera (auténtico capitán rojiblanco)?. ¿Ello va a suponer que, por fín, metamos gol de cabeza en algún córner (hace tres años que esto no sucede)?. ¿Ello va a suponer que dejemos de encajar goles de cabeza, en remate de jugadores contrarios más bajitos que nuestros defensas?.   ¿Ello va a suponer dar oportunidades a jugadores que pueden optimizar el rendimiento del equipo: Lawal, Njegus,... y que aún no se ha probado con ellos?. (Si están en la plantilla será para algo). En fín, queridos amigos, haced lo imposible para que los Atléticos recojamos la moral del suelo y podamos llevarla de nuevo a nuestros corazones. Un abrazo rojiblanco:

Modesto de Cantabria.

 

Futurólogo
Últimamente estoy bastante preocupado y no sólo por la ya no dramática, que sí desesperada situación de nuestro querido Atlético. De unos años a esta parte me vienen a la cabeza ciertos “pensamientos” sobre situaciones, normalmente desagradables, que luego suceden. No creo – al menos no me gustaría – disponer de ningún poder paranormal, sino más bien, achaco el fenómeno a eso inexorable que se llama “hacerse mayor” y tener un poco de sentido común.  
En la ya abandonada por mí lista atlética, antes de ISFA y ahora de Topica y de los amigos del Sr. Gil encabezados por Agus y algunos otros, en cierta ocasión se me ocurrió comentar como veía yo de negro el futuro del Aleti en manos de la familia Gil, por lo que tuve que soportar alguna que otra crítica. Solo he estado en una “kedada” en el Parador y ¡vive Dios que no elegí buen día! Fue justo el previo al partido del año pasado contra el Oviedo el día de la intervención. Recuerdo que hablando sobre lo que podía ocurrir, y teniendo en cuenta los momentos de indecisión que entonces vivíamos, se me ocurrió decir: “O Gil sale del Aleti o esto es el principio del fin...”. Fuí parado por un contundente ¡No jo...! de alguno de los contertulios. Hace unos meses, cuando los de la acera de enfrente anunciaron a bombo y platillo el fichaje de Figo, me quedé lívido cuando leí que Paolo Futre había intervenido decisivamente en la operación y pude ver en la tele imágenes en las que junto a unos sonrientes Florentino y Figo aparecía un también sonriente Paolo Futre... En ese momento escribí una columna para Señales, que finalmente no envié. Ahora que Pablito Futre regresa a su casa, a la que no se ha podido negar a acudir en su socorro, he rescatado el documento y adjunto lo envío, tal cual lo escribí. La fidelidad de Paolo Futre Una de las normas que llevo más a rajatabla en la vida es la de la fidelidad. La fidelidad a unos principios, a unas normas, a un respeto, a un cariño. De pequeñito mis padres me enseñaron a ser fiel a mi familia, a mis amigos, a mis creencias. Quizás, por ese desarrollado principio de la fidelidad, he podido soportar entre otras cosas - que aquí no vendrían a cuento - mis ya más de 41 años de colchonerismo impenitente, sin apenas pestañear, y eso que hemos “tenido de todo”, especialmente en los últimos trece años. Esa fidelidad por los colores rojiblancos me han hecho sufrir mucho, muchísimo, desde pequeñito - todos vosotros seguramente sabéis a lo que me refiero - pero al mismo tiempo me ha permitido reafirmarme en mis sentimientos y salir cada vez más fortalecido de situaciones ante las que otros – débiles mentales, sin duda - “hubieran caído con todo el equipo”. Bien, ¿por qué va todo este rollo de la fidelidad?. Pues porque esa virtud tan deseable de tener por una persona es desconocida en un sujeto que durante años se ha querido erigir en la bandera del colchonerismo: Paolo Futre. Este “pajarraco”, encumbrado a los altares del colchonerismo por otro personaje de su misma calaña – me refiero a Don Jesús – no solamente no conoce que es la fidelidad, sino que además carece de vergüenza. Futre en sus tiempos fue un buen jugador. Solo un buen jugador, ningún fenómeno. En esos primeros proyectos de Don Jesús era solo un jugador que destacaba entre las medianías con las que nos obsequiaba el presidente. Pero lo cierto es que los que hemos visto jugar a Collar, a Ufarte, a Ayala, a Becerra..., incluso a Hugo Sánchez, no creo que de verdad nos tuviera “tremendamente impresionados”. Su “espantada” del equipo en un momento crítico para nuestros intereses, loco por ponerse la camiseta blanca, creo que ya fue bastante significativa y comentada. Finalmente Gil consiguió que realizase el paso intermedio por el Benfica y allí, ante su inoperancia, a los blancos se les pasaron las ganas de ficharle y a él “se le pasó el arroz”. Después de peregrinar por varios equipos con más pena que gloria, probablemente por las lesiones, pero también más que probablemente por la “mala vida”, le llevó a un retiro forzado en Italia, donde cayó a la situación más baja y degradante a la que puede llegar un ser humano. Jesús Gil, en una decisión más que alabable y que le honra como persona – y no es que me guste hablar bien de Don Jesús precisamente, pero cuando algo está bien hecho hay que reconocerlo así – acudió en su ayuda y en apenas veinticuatro horas le metió en un avión con toda su familia y se le trajo a Madrid, colocándole como empleado del Club y dándole un soporte económico importante, ya que él había dilapidado su fortuna para pagar algunos de sus vicios. Paolo comenzó a frecuentar los entrenamientos del Atlético, dirigido por Antic, en Boadilla. Ya he contado en alguna ocasión como Antic “tiró” literalmente de él hacia arriba y después de recomendarle un doctor serbio para que pusiera en orden su maltrecha rodilla, le dio una oportunidad por la que, solo por el hecho de dársela, tenía que haber estado ya completamente entregado a su causa... el final de esa historia es también de todos conocida: en diciembre la armó por no jugar y se quiso ir a jugar a Brasil, donde no cuajó, terminando en Japón jugando algunos partidos. Futre regresó de sus aventuras brasileña y japonesa sin pena ni gloria y siguió pululando por el entorno del Manzanares. Después de mucho tiempo sin noticias de él, ahora reaparece poniendo a Figo en bandeja a los de la acera de enfrente. ¿Terminará sus días como directivo de la casa blanca, colmando las aspiraciones a las que no pudo llegar como jugador?. No me sorprendería. Aunque tampoco me sorprendería menos si Don Jesús, en uno de sus alardes le propone como directivo nuestro. ¿Utilizará su puesto para transferir alguna joven promesa rojiblanca a los de la acera de enfrente? ¡Quien sabe, pero en este mundo loco del fútbol y, sobre todo en el entorno de lo que queda de nuestro querido Aleti todo puede suceder! Por lo pronto, esta historia me ha servido para “repasar” a mi hijo los conceptos de “fidelidad”, por los que me gustaría llevarle al igual que mis padres me llevaron a mí. La verdad es que a veces me sigo sorprendiendo conmigo mismo... ¿Qué que va a pasar con el Aleti? Ahora es el momento. Si conseguimos sacar a Gil de aquí no dudéis que volveremos donde estábamos antes de este mal sueño... Si Gil sigue apenas unos meses más...    
Posted: 04 nov 2000, 12:00 por SDHEditor
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El Equipo
Ni gil ni Calderón ni la madre que los trajo al mundo. Yo creo que tenemos un equipo sin carácter. Cierto que gilito no ayuda. Cierto que se equivoca constantemente tanto en fichajes como en jugadores. Y cierto, - al menos para mí- que debe irse del Club lo antes que pueda, porque esto no puede (debe) seguir así.

 


Pero estaréis de acuerdo conmigo que este equipo no es tan malo. Es un aceptable equipo de 1ª División y, actualmente, esta en puestos de descenso en 2ª. Nos falta un Simeone, no por lo que juegue, sino por el carácter que imprime al equipo. Por que no se asusta. Porque no le puede la presión. Porque pide la pelota cuando más grita la gente  y hace su trabajo asumiendo su responsabilidad. Este debía ser Kiko, pero no vale para eso. Aguilera tampoco.

A nuestros jugadores la  pelota les asusta. Cada balón que conducen  los delanteros de los equipos contrarios causa pánico en la defensa. Están descontrolados, asustados, encogidos. Vamos, como el tipo del anuncio de Vía Digital al que le ponen a lanzar un penalty.

La misión de Marcos debe ser convencerles de que no son tan malos. Que no deben ser como los demás, sino ser ellos mismos. Alguien debe decirle a Salva, - que me parece un buen jugador de Fútbol- que esto no consiste en
provocar peleas de tugurio nocturno, con entradas a destiempo y codazos voladores. Que él sabe más. Que ellos valen más. Eso no es tener carácter sino perder los nervios.

Quizá sea porque nos hemos pasado mucho tiempo apelando a sus genitales para que ganen los partidos pero lo cierto es que no es que sean malos es que, actualmente, no son jugadores de Fútbol. Se matan a correr como
juveniles, tocan la pelota como aficionados y se hunden psicológicamente como adolescentes. Marcos tiene que recordarles que son unos privilegiados, no por los emolumentos que perciben, sino porque juegan al Fútbol y son
capaces de hacerlo bien. Solo cuando dejen de asustarse por lo que pensará de ellos el Calderón si fallan en la entrega del balón o no se pegan una carrera absurda por un balón perdido, cuando tengan carácter para asumir que
son Profesionales y, además, buenos, podremos salir todos del pozo.

Posted: 03 nov 2000, 12:00 por SDHEditor
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¿PODEMOS CAER MÁS BAJO? (02/11/2000)

Pasadas las diez primeras jornadas del "añito en el infierno", creo que casi nadie podía imaginar un comienzo tan aterrador. No ya por el juego horripilante, ni por los resultados abrumadores, sino por la imagen que están dejando del Club y por el sufrimiento que están generando a una afición que este año queríamos estar más que nunca con el equipo.

 


 

En este disparate en el que nos hayamos inmersos, habría que repartir palos para casi todos:

- La plantilla, y sobre todo los que jugadores que deberían tener más peso específico dentro del vestuario, están demostrando ser unos fracasados y tener una falta de carácter bestial. No es que sobre calidad por los cuatro costados, pero sobre el papel sí hay la suficiente para marchar a la cabeza de la tabla clasificatoria y obtener un ascenso más o menos cómodo; muchos de ellos tienen un nombre que no están demostrando en el césped, repitiéndose la historia del año pasado con otros protagonistas. No apelan ni al orgullo siquiera para conseguir sacar partidos adelante.

- Gil, y su hijo detrás con todos los asalariados que les aconsejan, por fracasar una y otra vez en la confección de una plantilla a la altura de las circunstancias. Nombraron a Zambrano cuando era "la crónica de un fracaso anunciado", aunque Gil le defendió como una apuesta personal, se han perdido tres meses de trabajo, permitieron que existiera un hueco descomunal de calidad en el centro del campo que estaba totalmente cantada. Tras la marcha forzada de Baraja se embolsaron el dinero para traer a cambio a Carcedo ...

Ahora, ya en noviembre, y teniendo que trabajar contra el reloj, Gil decide cambiar por completo el rumbo: nuevos jugadores en diciembre, cese de Miguel Ángel Ruiz, nuevos hombres para la Secretaría Técnica, "limpias" en el vestuario que pueden empezar por Kiko.

Una falta de total de planificación deportiva y cambios de timón a la desesperada. ¿Por qué no asumirá sus culpas el señor Gil? ¿Por qué no acepta que el que se equivoca es él? ¿Cuántas salidas de pata de banco tendremos que aguantarle? ¿Hasta qué profundidad del abismo nos va a llevar? ¿Hasta dónde aguantaremos estoicamente los atléticos sin alzar la voz y pedir que nos olvide?