A la atención de Paulo Jorge Dos Santos (15/03/2003)
Efectivamente, ayer se presentó el centenario y los actos que se van a celebrar en este año tan especial para todos los atléticos. Entre todos estos anuncios creo que sería muy ingrato por nuestra parte no acordarnos, ahora más que nunca, del jugador que más nos ha ilusionado, más carismático y espectacular en los últimos 15 años, el cual, seguramente no esté pasando por su mejor momento.
No es justa su situación y menos ahora. Va por ti:
Fuiste mi ídolo, nuestro buque insignia, siempre sacaba pecho en el colegio presumiendo de ti, sobre todo cuando tenía que soportar a todos los merengues con sus delirios de grandeza. Sin duda mis primeros recuerdos como atlético, irán siempre ligados a tu camiseta con el 10 a la espalda y a la zona del campo de la que eras amo y señor: tu banda izquierda.
De bien nacidos es ser agradecidos, por eso quiero gritar desde este rincón: GRACIAS por todo lo que nos has dado, GRACIAS por habernos hecho disfrutar tanto con tu juego y a estas alturas, permitidme la licencia de recordar uno de los goles que más feliz me ha hecho en mi vida y con el que, cada vez que lo veo, se me pone un nudo en la garganta duro de tragar:
27 de Junio de 1992, final de la Copa del Rey, estadio Santiago Bernabeu, después de la magistral falta tirada por Bernardo, en el minuto 28 y tras una épica galopada batiste a Buyo con un increible chutazo por toda la escuadra. Dios!!! Qué feliz fui aquel día!!!
Por todo eso, por haber estado siempre ahí, no tengo palabras. GRACIAS PAULO. GRACIAS FUTRE.